¿Qué es el Parkinson y cómo se produce?
El Parkinson es un trastorno neurológico que se caracteriza por la pérdida progresiva de neuronas dopaminérgicas en una zona del cerebro llamada sustancia negra. Estas neuronas son las encargadas de transmitir señales que regulan el movimiento y la coordinación de los músculos. Cuando se deterioran, se producen síntomas como temblor, rigidez, lentitud de movimientos e inestabilidad postural.
Las causas del Parkinson son desconocidas, aunque se cree que pueden intervenir factores genéticos, ambientales o una combinación de ambos. No existe una cura para esta enfermedad, pero hay tratamientos que pueden aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
¿Qué beneficios puede aportar la TOHB?
La terapia con oxígeno hiperbárico (TOHB) es un tratamiento que consiste en respirar oxígeno puro en un ambiente presurizado. La presión se eleva entre 2 y 3 veces más que la presión normal del aire, lo que permite que los pulmones puedan albergar mucho más oxígeno de lo que sería posible respirando oxígeno puro a la presión normal del aire. Este oxígeno extra se distribuye por todo el organismo a través de la sangre y llega a los tejidos que lo necesitan.
La TOHB tiene varios efectos beneficiosos para los pacientes con Parkinson:
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Aumenta la disponibilidad de oxígeno en el cerebro, lo que favorece la función neuronal y la neuroprotección.
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Estimula la liberación de factores de crecimiento y células madre, que pueden contribuir a la reparación de tejidos nerviosos dañados.
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Tiene efectos antiinflamatorios y antioxidantes, que pueden reducir el estrés oxidativo y la inflamación en el sistema nervioso.
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Mejora el flujo sanguíneo cerebral, lo que puede prevenir o revertir la isquemia (falta de riego sanguíneo) en algunas zonas del cerebro afectadas por el Parkinson.
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Tiene efectos sobre los neurotransmisores, como la dopamina, la serotonina y el glutamato, que pueden regular el estado de ánimo, el sueño y el apetito.
Estos efectos pueden traducirse en una mejora de los síntomas motores y no motores del Parkinson, como el temblor, la rigidez, la marcha, el equilibrio, la coordinación, la fuerza muscular, la expresión facial, la voz, el ánimo y la cognición.
¿Qué evidencia científica respalda el uso de la TOHB en estos casos?
Un estudio reciente sugiere que la Terapia con Oxígeno Hiperbárico (TOHB) puede ser una terapia complementaria potencial para la enfermedad de Parkinson (EP). Los resultados mostraron que el tratamiento con TOHB aumentó significativamente el número de neuronas positivas para la tirosina hidroxilasa, mejoró el factor neurotrófico BDNF, disminuyó la señalización apoptótica y atenuó los mediadores inflamatorios en el mesencéfalo de ratones tratados con MPTP. Además, el tratamiento con TOHB mejoró la actividad locomotora y la fuerza de agarre de los ratones tratados con MPTP. Los efectos de la TOHB en ratones tratados con MPTP podrían provenir de la promoción de la biogénesis mitocondrial, la disminución de la señalización apoptótica y la atenuación de los mediadores inflamatorios en el mesencéfalo, lo que sugiere sus posibles beneficios en el tratamiento de la EP.1
¿Qué precauciones hay que tener?
La TOHB es un tratamiento seguro y con pocas contraindicaciones. Sin embargo, como todo procedimiento médico, implica algunos riesgos y requiere algunas precauciones.
Los posibles riesgos incluyen:
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Lesiones en el oído medio, como perforación del tímpano o pérdida de líquido, debido a los cambios de presión del aire. Para prevenirlos, se recomienda realizar maniobras de Valsalva (soplar con la nariz tapada) durante el ascenso y el descenso de la presión.
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Miopía temporal, causada por cambios en el cristalino del ojo. Suele revertirse al finalizar el tratamiento.
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Colapso pulmonar o barotrauma pulmonar, provocado por cambios en la presión del aire. Para evitarlo, se debe respirar normalmente durante toda la sesión y no contener la respiración.
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Intoxicación por oxígeno o toxicidad por oxígeno, producida por una exposición prolongada a altas concentraciones de oxígeno. Puede causar convulsiones o daño cerebral. Para prevenirla, se debe respetar el protocolo médico de duración y frecuencia de las sesiones.
Las precauciones que hay que tener antes y después de cada sesión son:
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No fumar ni consumir alcohol o drogas.
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No tomar medicamentos que puedan alterar el efecto del oxígeno o aumentar el riesgo de sangrado.
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No comer alimentos pesados ni beber demasiado líquido.
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No realizar ejercicios físicos intensos ni viajar en avión.
Si quieres saber más sobre cómo prepararte para una sesión de TOHB, te invitamos a leer nuestro artículo en Cómo prepararse para una sesión de oxigenoterapia hiperbárica.
La TOHB debe realizarse bajo supervisión médica y siguiendo las indicaciones del especialista. No todas las personas con Parkinson son candidatas a este tratamiento ni obtienen los mismos resultados. Por eso es importante consultar con un profesional cualificado antes de iniciar cualquier terapia.
Conclusión
La terapia con oxígeno hiperbárico es un tratamiento complementario que puede ayudar a mejorar los síntomas del Parkinson y la calidad de vida de los pacientes. Consiste en respirar oxígeno puro en un ambiente presurizado, lo que aumenta la cantidad de oxígeno que llega al cerebro y a los tejidos dañados por la enfermedad. La TOHB tiene efectos neuroprotectores, regenerativos, antiinflamatorios y antioxidantes, así como sobre los neurotransmisores implicados en el movimiento y el estado anímico. Es un tratamiento seguro y con pocas contraindicaciones, pero requiere algunas precauciones y supervisión médica.
